Es el hacer sin medida y sin descanso lo que mueve mi llanto. Para aquel que a puro desgarro compromete toda su existencia. Y tan así tan abarrotado deja su aliento en los bolsillos del amo. Claro que duele no sabernos soberanos!
La última vez que tomé cocaína fue en diciembre de 2005, más o menos un año atrás, en Flores, Buenos Aires. Dejo a un lado todas las justificaciones que tuve y me paro sobre el papel a confesar los recuerdos de aquellos días...
Donde Antonio Romero le escribe a Zapatero Publicado por Alfonso Valencia11 Noviembre, 2008Sin Comentarios Desde que hace un par de días murieron dos soldados españoles en Afganistán a causa del acto terrorista de un suicida...